Al paso de un siglo caracterizado por guerras permanentes, el expolio de la naturaleza y las comunidades, así como por una sobrepoblación descontrolada y una corrupción generalizada, el peso de la responsabilidad humana en las catástrofes fue más abrumador, al tiempo que fue cerniéndose, de forma cada vez más ominosa una realidad insoslayable; la de la demagogia, la mentira política y los abusos hacia las periferias, como caldo de cultivo de conflictos, si bien inicialmente constreñidos a geografías acotadas y lejanas, pronto se convirtieron en una realidad cada vez más cercana e ineludible, que de una u otra forma nos tocaba a todos a partir de las migraciones, hasta llegar, en nuestros días a la realidad brutal de una pandemia inducida por los cambios planetarios producto de la actividad humana a la que nadie puede ser ajeno.
Es así que en el presente libro se abordan diversas formas de interrelación entre el desorden social y los sujetos. Desde una mirada múltiple a las catástrofes humanas en la cultura; éstas se analizan tanto desde el factor subjetivo implicado en los sucesos catastróficos, como desde la potencia de la imaginación creadora de la literatura, así como desde la migración colectiva y la producción de los imaginarios colectivos construidos a partir de la producción audiovisual. Buscamos así acercarnos a la comprensión de los modos en que estos procesos se representan las subjetividades. Para de esta forma, contribuir a la reflexión sobre las maneras de imaginar, concebir y representar este tipo de fenómenos, tarea cada vez más necesaria.
